Repasamos con el joven sprinter de Movistar Team su primer contacto competitivo con los velódromos, faceta que compaginará este invierno con los entrenamientos en ruta
Después de ser uno de los mejores debutantes entre los neoprofesionales españoles de 2011 –victoria de etapa en la Vuelta a Madrid, incluida-, Enrique Sanz afronta ya la preparación de la que será su segunda campaña en la máxima categoría mundial. A sus 22 años, el navarro de Movistar Team ha decidido compaginar durante el periodo invernal sus entrenamientos en carretera con la disputa de pruebas en pista, una especialidad que ya conoce desde las categorías inferiores. “Hice pista los dos años de júnior y el primero de amateur –explica Sanz-. En juveniles, incluso logré una medalla en los Nacionales en velocidad olímpica, pero ni el año pasado ni el último en aficionados seguí con la actividad en el velódromo”.
Sus buenas prestaciones en las llegadas masivas en la campaña de su presentación ante el pelotón protour le dieron el empujón necesario para regresar a la pista. “Cuando pasé a profesionales, tenía muchas dudas de cuál era mi sitio. En amateurs era un buen sprinter, pero eso no era un indicativo porque cuando estaba bien marchaba en todos los terrenos. Pero el año ha salido mejor de lo esperado en los sprints y creo que es hacia allí donde debo enfocar mi carrera. Hablé con Jon Iriberri, mi preparador, y entre ambos decidimos que el trabajo en la pista podía ser positivo en ese sentido”. Y es que Sanz sólo ve ventajas a su introducción en el velódromo: “No sólo te hace mejorar en los sprints; también en la agilidad, la colocación, la habilidad… y, además, te puede dar un mejor punto para el inicio de temporada”.
El velocista navarro vivió su estreno competitivo el pasado fin de semana -volverá a correr el próximo domingo- en el velódromo donostiarra de Anoeta, en la cuarta jornada del Trofeo Gipuzkoa, con la disputa de las pruebas de puntuación (10º), eliminación (5º) y scratch (3º). “Hacía dos años que no corría en pista, pero me encontré mejor de lo esperado –desvela Sanz-. Los resultados son lo de menos, pero al final en la competición acabas calentándote, aunque en pruebas como la eliminación, cuando vi que estaba haciendo un esfuerzo excesivo, preferí no llegar al límite. Las primeras sensaciones han sido muy buenas, fui más cómodo de lo esperado y muy ágil con el desarrollo de 49×16 que elegí”. Sanz seguirá compaginando la pista con la ruta durante el mes de diciembre en cuya segunda mitad, “ya habrá que correr en la pista para ganar”. En el aire queda su presencia en los velódromos durante el mes de enero, a expensas de su posible presencia en Australia o Argentina –“de momento, soy primer reserva en ambas”, las dos competiciones que estrenarán al Movistar Team 2012. “Después, estaré en Mallorca, Mediteráneo, clásicas, Madrid… un calendario similar al del pasado año y con parecidos objetivos –apunta Enrique-. El principal, continuar aprendiendo y fijándome en cada detalle de lo que hacen Ventoso, Rojas o Alejandro en las llegadas, ayudar al equipo lo máximo posible y, cuando lleguen mis oportunidades, tratar de aprovecharlas”.