Madrazo vuelve a ser valiente
05 Abril 2012

Vuelta al País Vasco (4ª)

El joven cántabro toma el relevo de su compañero José Herrada ayer hacia Arrate y se escapa bajo la lluvia y el frío camino de Ibardin, tras sufrir un percance en el inicio de etapa

El segundo final en alto consecutivo de la Vuelta al País Vasco 2012, la ascensión al Alto de Ibardin en Bera de Bidasoa tras 151 kilómetros y cuatro puertos puntuables con salida en Eibar, asistió al triunfo en solitario de Joaquim Rodríguez (KAT) tras una jornada infernal, con fuerte lluvia en el inicio de carrera y un frío persistente que no pudo, sin embargo, contener las aspiraciones de un Ángel Madrazo inspirado durante toda la semana desde su 3º puesto en el GP Miguel Indurain del pasado sábado. El cántabro de la escuadra telefónica sufría un pinchazo en los primeros kilómetros que no le impedía conectar con el pelotón y saltar, en el kilómetro 59 de carrera, junto a otros cuatro corredores.

El quinteto, siempre por debajo de los dos minutos de renta, afrontó en cabeza las subidas a Aritxulegi y Agiña antes de ser alcanzados por un primer contraataque de los GreenEdge Sulzberger y Meier y, después, de Sörensen (SAX) y Albasini (GEC), descolgándose poco antes de la última subida a Ibardin tras su gran esfuerzo. En la cima, Rui Costa y Vasil Kiryienka volvían a ser los mejores del conjunto azul, a poco más de medio minuto del ganador, en el día previo a la llegada a Oñati, que acogerá la contrarreloj decisiva (sábado) y donde el pelotón descansará el viernes tras la quinta etapa: 183 kilómetros con cinco ascensiones y el Alto de Asentzio (2ª) a 24 kilómetros de la conclusión.

DECLARACIONES Ángel Madrazo: «Ayer tuve mala suerte con un pinchazo en Ixua, dejé muchas fuerzas para entrar de nuevo en el grupo y perdí tiempo para la general, así que había que intentarlo desde lejos. Desde que pinché al principio de la etapa hoy, pensaba ‘que no se vaya la carrera, que tengo que coger la fuga como sea’. En un repecho nos hemos podido marchar los cinco para adelante y durante todo el día pedía que siguiese lloviendo para, al menos, mantener las diferencias en las bajadas, pero no ha podido ser porque Euskaltel y Katusha han tirado en todo momento y no nos han dejado coger diferencias. Mañana, que no quepa duda: intentaré entrar de nuevo en la escapada para pelear la etapa».