Rui encuentra su premio
11 Junio 2012

Vuelta a Suiza (et. 2)

Después de varios intentos al poste, el luso logra su primer triunfo del año en un agónico final en la primera meta en alto de la carrera, en la que ya es líder. 17 victorias para el equipo en 2012

Segundo en una etapa de Romandía y 3º en la general, 2º en una de las jornadas de Mallorca, 3º en la etapa reina de Algarve, 4º en el G.P. Indurain… a Rui Costa se le negaba su primer triunfo en 2012 y hoy el luso del Movistar Team ha encontrado el merecido premio a su rendimiento con el triunfo en la primera etapa en línea de la Vuelta a Suiza. Costa se ha impuesto en la cima de Verbier, puerto de categoría Especial en el que concluían los 218 kilómetros de recorrido, y que ha acabado seleccionando un grupo de una veintena de unidades en el que Movistar Team situó a Valverde y Costa. Por delante, Fränk Schleck (RNT) mantuvo siempre una renta en torno al medio minuto tras un ataque a falta de seis kilómetros que sólo pudo ser superado por Rui –muy activo durante toda la ascensión- en los últimos 100 metros, después de que el luso lograra despegarse del grupo ya dentro del último kilómetro y en un supremo esfuerzo enjugase los más de veinte segundos que tenía el luxemburgués bajo el triángulo rojo.

La renta conseguida permite al portugués -11 triunfos en sus seis años pro- enfundarse el maillot amarillo de líder y firmar la 17ª victoria de Movistar Team –con once ciclistas diferentes- en su ya sobresaliente 2012. Cerca del luso permanece Alejandro Valverde, siempre en vanguardia hoy, y que se sitúa séptimo en una general que mañana tendrá un nuevo capítulo con la tercera etapa de la ronda helvética: 195 kilómetros entre Martigny y Aarberg con dos cotas de 3ª y 4ª categoría en los últimos 25 kilómetros del recorrido.

DECLARACIONES Rui Costa: No había corrido nada desde Romandía y en estas situaciones siempre vienes con un poco de incertidumbre. Por eso me he movido varias veces en el puerto, para ver cómo iba la gente, pero sobre todo para saber cuáles eran mis sensaciones. El hecho de llevar a Alejandro detrás también me daba más libertad porque sabía que si no me marchaba, nos quedaba su opción. En el último ataque veía que Schleck estaba muy lejos y sinceramente no pensaba en ganar, pero he arrancado fuerte, he visto que iba bien y que poco a poco me acercaba. Cuando le he alcanzado, he respirado un instante y le he atacado porque he visto que él iba muy justo. Es una gran alegría porque este año me estaba costando más ganar que otras temporadas y yo soy un corredor que necesita ganar para coger más confianza. Por primera vez he hecho un trabajo de varias semanas en altitud de cara al Tour y de momento parece que las cosas van bien, pero el objetivo final siempre es julio, aunque esto no es una ciencia exacta y a veces te encuentras mejor cuando menos te lo esperas y al revés. Para mí ser líder de Suiza es increíble, pero todavía queda mucho y hay que ir día a día. Se lo dedico a mi familia, a mis amigos y a mi mujer, que siempre están a mi lado y, por supuesto, en este día a Mauricio Soler, que el año pasado ganó esta etapa”.