Valverde, ambicioso hasta el final
11 Abril 2014

Vuelta al País Vasco (et. 5)

El líder de Movistar Team -2º en Markina- apuesta fuerte con su ataque en San Miguel tras el gran trabajo del equipo y saldrá mañana en la CRI decisiva a 12" de Contador (TCS)

Alejandro Valverde y Movistar Team se han volcado de lleno este viernes en poner a su favor una Vuelta al País Vasco 2014 que llegará mañana a su jornada decisiva con catorce corredores en menos de un minuto de margen. La escuadra telefónica volvió a montar zafarrancho en el final de una 5ª etapa -160 km entre Eibar y Markina-Xemein- con cuatro puertos encajonados en apenas sesenta kilómetros. La labor de Herrada, Intxausti o los hermanos Izagirre seleccionó poco a poco el pelotón y controló todos los ataques, entre ellos una fuga de dieciséis unidades en la que Rubén Plaza se mantuvo vigilante ante cualquier movimiento.

En el último ascenso, San Miguel (2ª), Valverde hizo su apuesta con un ataque seco al que sólo pudieron responder Contador (TCS), siempre pegado a su rueda, y Poels (OPQ), que conectó con ambos bajo la pancarta del puerto. El habilidoso descenso del líder azul mantuvo vivas las esperanzas del trío cabecero, pero el fuerte viento de cara y el llano previo a meta provocaron la neutralización y decretaron un sprint en el que el murciano fue batido por Swift (SKY), el único velocista que pudo pasar las ascensiones.

Las subidas a Gontzaga y Santa Eufemia, ya transitadas en la etapa de hoy, decidirán mañana la Itzulia sobre 25’9 km de crono individual, a los que Valverde -líder de la clasificación por puntos- llegará con 12″ de desventaja sobre Contador, 24″ de margen ante Cunego (LAM), Evans (BMC), Péraud (ALM) y Trofimov (KAT) o 29″ con Kwiatkowski (OPQ).


DECLARACIONES / Alejandro Valverde:
«Estamos los dos ahí, Alberto y yo, luchando por la general, con algunos cuantos más cerca, y hay que probar donde se pueda. Lo he intentado en San Miguel, nos hemos ido, pero era difícil: había mucho viento de cara y en los 2 últimos kilómetros llanos nos han pillado. Es cierto que la lucha ahora mismo está un poco más entre los dos, pero hombres como Kwiatkowski o Evans no están para nada fuera de esa pelea, y la de mañana es una crono muy exigente. De salida, si pega el viento como hoy lo hará de cara. La primera subida es menos dura, pero la segunda es bastante exigente. La CRI termina en la cima de ese puerto, porque la última bajada es todo recto y no hay diferencia; se puede decir que tiene 20 kilómetros. El equipo ha estado genial, de diez, desde el primer día al último, y es de agradecer. Veremos si mañana podemos rematar ganando la carrera; sabemos que es muy difícil, pero si se gana será dedicado al equipo, porque sin ellos está claro que es imposible«.