Ion, la entrega; Dani, la valentía
12 Marzo 2016

París-Niza (et. 6) / Tirreno (et. 4)

Izagirre es 9º en la Madone d’Utelle y sexto en la general de París-Niza, tras grandes nombres del pelotón mundial; Moreno se filtra en los cortes del caótico final de Foligno y acaba 4º en la cuarta etapa de Tirreno, donde mañana no habrá carrera

Geraint Thomas, Contador, Zakarin, Porte, Tom Dumoulin… e Ion Izagirre. Varios de los nombres que han copado el protagonismo en las crónicas de ciclismo de grandes vueltas durante los últimos años son las cinco únicas casillas por encima de Ion Izagirre en la general de París-Niza a falta del explosivo (134 km) e imprevisible fin de fiesta mañana en la costa.

La jornada ‘reina’ de la prueba gala, 177 km sin un solo metro de llano que aun así se cubrieron a más de 41 km/h de media, dejaron sufrimiento para todos: desde el hasta hoy líder Matthews (OGE), descolgado por el fuerte ritmo de Sky en la ascensión a Duranus (2ª), hasta el mismo Ion, que cedió algunos metros cuando Majka (TNK) elevó sobremanera el ritmo. Apoyado hasta la Madone por los Erviti, Jesús Herrada, Rubén Fernández, José Herrada o su hermano Gorka, el pequeño de los de Ormaiztegi supo reponerse y perseguir después de forma denodada cuando una aceleración de Contador, Henao y Thomas le condenó al segundo escalón de favoritos.

Ion cruzaba la meta en 9º lugar, a 31” del vencedor Zakarin (KAT), y se coloca a 17” del codiciado cajón de una carrera que se decidirá, como muchas otras veces en la pasada década, en el ascenso y el aún más determinante descenso del Col d’Eze (1ª), camino de la famosa Promenade des Anglais.

Tirreno: Moreno surge entre el caos… antes de la suspensión de mañana

En Italia, Movistar Team estuvo particularmente activo durante la cuarta etapa de la Tirreno-Adriático, todo un ensayo general de la Milán-San Remo, con 222 kilómetros y un circuito final en Foligno donde los hombres dirigidos por Jaimerena y Chente pusieron buena parte del ritmo. El trabajo de los Oliveira, Amador o Dowsett para cazar la fuga del día, elevar la marcha y liberar de presión a sus compañeros acabó propiciando dos movimientos azules: el de Giovanni Visconti, en el descenso de la última subida a Montefalco -a 15 km de meta-, y el de Dani Moreno, ya en el llano final, a cuatro kilómetros de la conclusión.

Moreno llegaba a un grupo de cabeza del que saltó Cummings (DDD) para hacerse con el triunfo, mientras el madrileño concluía en cuarta posición, a 13”, dentro del sprint de los perseguidores. La general continúa por lo demás intacta entre los favoritos y seguirá así, por desgracia, hasta el lunes: las previsiones de nieve y la inexistencia de un plan alternativo viable obligaba esta misma tarde a los organizadores a comunicar que la quinta etapa, con final en Monte San Vicino, quedaba anulada en su totalidad, lo que hará que la carrera se reanude el lunes camino de Cepagatti.

LAS VOCES DEL DÍA:

Ion Izagirre (6º en la general París-Niza a un día del final; audio): "La subida ha sido dura y toda la etapa también… y toda la París-Niza también. Agradezco al equipo el apoyo: siempre me han llevado bien situado, hoy especialmente importante por el terreno tan complicado. En la última ascensión hemos intentado aguantar con los mejores; se nos han ido los más fuertes, pero hemos estado en el segundo grupo. Por mi parte estoy satisfecho con el trabajo hecho. ¿Mañana? Estamos bastantes corredores en pocos segundos y seguro que mañana habrá mucha guerra. La última etapa siempre es muy complicada, de muchos nervios, relativamente corta… todos estaremos pendientes de todos, seguro que se mueve gente y habrá que estar muy atentos. ¿Aprender de hoy? Bueno, en realidad sabía que con gente como Contador, Henao, Richie… son superiores a mí en estas subidas. No tenía mucha pendiente el puerto, pero 15 km siempre se hacen largos. He estado en mi sitio y estoy contento".

Dani Moreno (4º en la cuarta etapa de Tirreno-Adriático; audio): “La idea poniendo a tirar al equipo en las cotas era intensificar el ritmo para ver si podíamos seleccionar un poco y también estar bien delante, que con la tensión del final era importante y te quitabas muchos problemas de encima. Visco había atacado antes pero el movimiento mío no era planeado, sino la situación de carrera. El único equipo que podía controlar era el que más ha atacado, Dimension Data, y al final encima han conseguido la victoria. Yo he esperado un poco para salir a esos movimientos, porque pegaba mucho viento de cara y cuando entrabas en el curveo final cerca de meta era más fácil protegerse… ya que yo no ruedo mucho (ríe). Ha sido darlo todo para pillar a los de cabeza, y al final he podido llegar con ese grupo a meta… pero nada más alcanzarles había arrancado Cummings, y ha sido imposible”.

Clasificaciones: París-Niza | Tirreno-Adriático