HECHO EN EL BARRO. El camino de Gorka Izagirre hacia el profesionalismo es bien conocido y viene de familia: su padre, José Ramón, fue un destacado ciclocrossman, con dos campeonatos de España absolutos de la modalidad, que transmitió a sus hijos -también a Ion, varios años parte de la estructura Abarca y con quien todos en nuestro equipo guardan una gran relación- la pasión por el ‘barro’.
SEGUNDA ETAPA. En Movistar Team explotó, entre las temporadas 2014 y 2017, buena parte del potencial que atesora como uno de los ciclistas más completos de nuestro país. Fue esencial para muchos triunfos colectivos -inolvidable su contribución al éxito en el Giro 2014- y logró tres victorias individuales, dos en Euskadi (Amorebieta, en 2017, y Ordizia, en 2014) y uno de gran prestigio: la 8ª etapa de la ‘Corsa Rosa’ de 2017, pocos meses antes de dejar por unos años el equipo. “Me siento como un niño que ha visto mundo y está listo para volver a ofrecer en casa todo lo que he aprendido en estos años”, fueron sus palabras al confirmarse su regreso.
TRABAJO Y RESULTADOS. Ciclista rocoso, enorme fondista y capaz de sobresalir en terreno escarpado, las clásicas más inaccesibles para un corredor de ‘casa’ o escenarios tan variados como el pavé o la alta montaña, ha logrado victorias de nivel en los últimos años: el Nacional de 2018 -año en que se subió nada menos que al podio de París-Niza-, el Grande Trittico Lombardo (2020) o la general del Tour de La Provence (2019). Su brillo no fue tan destacable en 2022 por el rol que tomó, alargada ‘sombra’ de un Enric Mas al que acompañó hasta el desdichado y abrupto final del mallorquín en el Tour de Francia. Ejemplo de que la labor de los gregarios -tan inquebrantable fue su apoyo durante julio- es muchas veces injustamente reconocido si no llegan los triunfos.
2022: Movistar Team
2019-21: Astana-Premier Tech
2018: Bahrain-Merida
2014-17: Movistar Team
2010-13: Euskaltel-Euskadi
2009: Contentpolis-AMPO