Una fuga impide el sprint y las opciones de Rojas
21 Marzo 2011

Una temprana escapada de cuatro ciclistas, entre los que el letón Smukulis  ha sido el único de soportar el empuje del primer pelotón, ha impedido en la meta de Lloret de Mar el primer sprint en la 100ª Volta a Catalunya y, con ello, las opciones de José Joaquín Rojas de vestirse con el primer maillot de líder de la carrera.

El murciano de Movistar Team ha sido tercero en la llegada, medio minuto por detrás del fugado y sólo superado por el italiano Petacchi en el sprint del primer pelotón, seleccionado en la ascensión al alto de San Grau (1ª categoría), a poco más de 30 kilómetros del final. En esa avanzadilla de ochenta unidades –apenas 50 en la cima del puerto, en cuyo descenso empalmaba Petacchi- estaban, además de Rojas, las otras grandes bazas de Movistar Team: Tondo, Intxausti y Pasamontes, pero no el colombiano Soler, que acusaba su parón competitivo tras la fuerte caída en la Vuelta a Murcia. «La pena ha sido que Erviti y Fran Pérez no aguantaran por poco, porque con ellos creo que podíamos haberles alcanzado», se lamentaba José Luis Arrieta, director de Movistar Team. Mañana, segundo capítulo, en la víspera de la esperada etapa reina del miércoles en Andorra. Serán 169 kilómetros de trazado entre Santa Coloma de Farners y Banyoles, con el alt des Angels, (1ª cat.) mediado el recorrido.

“Ha sido un poco mezcla de todo –explicaba Rojas para justificar el error de cálculo del pelotón en la caza de la fuga-. Entre que al final no teníamos muchas referencias, que no ha habido mucho acuerdo, nos han faltado veinte segundillos para pelear por el triunfo. También el puerto ha eliminado mucha gente que podía haber tirado. En Pasamontes ha hecho un trabajo excelente desde que hemos coronado, pero Tondo e Intxausti tampoco se podían exprimir porque pueden luchar por la general. En el sprint he arrancado muy lejos  viendo que ya no le cogíamos y al final me ha pasado Petacchi. Pero es muy diferente esprintar para ser primero que para ser segundo. En teoría, quedan cinco días con opciones de llegar al sprint y no tengo miedo a jugármelo con él. Después de cómo me he encontrado en Paris-Niza o Milán-San Remo hay que tratarles de tú a tú. Siempre te da rabia porque es una oportunidad menos, pero hoy me quedo con las sensaciones que he vuelto a tener y con ver que me he recuperado de la paliza del sábado”.