Landa y Amador, sobresalientes en la última etapa de montaña del Tour
27 Julio 2018

Tour de Francia (et. 19)

Mikel -Combativo de la jornada, sexto en la general- termina 7º en Laruns tras más de 70 km al ataque por el Tourmalet y el Aubisque, ayudado por un Andrey extraordinario. Quintana, puro sufrimiento y entrega, cede 7' y es 9º.

Movistar Team salió decidido a dar un vuelco al Tour de Francia 2018 en la última etapa montañosa de la carrera, un recorrido de 200 km entre Lourdes y Laruns con seis puertos puntuables y tres imponentes colosos como el Aspin (1ª), el Tourmalet y el Aubisque -ambos de categoría Especial-. Mikel Landa fue durante más de dos horas de carrera protagonista en una valiente acción iniciada al pie del puerto más mítico de los Pirineos, y que solo los grandes favoritos de la carrera pudieron doblegar.

Saliendo a una arrancada de Zakarin (TKA) en el inicio del Tourmalet, Landa se fue en busca de Daniele Bennati, descolgado de una fuga inicial de 18 corredores, y después, acompañado por Andrey Amador, coronó la subida con una ventaja que llegaba ya entonces a superar los dos minutos sobre el resto de favoritos. El extraordinario trabajo de Amador permitió que Mikel llegase hasta la cabeza de carrera y obtuviese, a pie del Col des Bordères (2ª), una ventaja de tres minutos y medio que incluso le hizo coquetear con el liderato virtual del Tour.

La reacción posterior de Lotto-Jumbo, en pos del triunfador de etapa Primoz Roglic, anuló dos minutos de esa ventaja en Bordères, y los ataques del esloveno o de Tom Dumoulin (SUN) acabaron de neutralizar una escapada que murió para Landa a 2 km de la cima del Aubisque. Por detrás, ya descolgado desde el Soulor, Nairo Quintana afrontaba un auténtico calvario por las secuelas de la caída del día anterior, que le llevaría a ceder 7′ en meta y caer al 9º puesto de la general.

Mikel supo aferrarse a sus opciones incluso en el descenso, donde Roglic anticipó con maestría a un grupo de elegidos que concluyó a 19″, con Landa, 7º en la etapa y 6º en la general -a 4’40» de Geraint Thomas-. Con Movistar Team todavía líder por escuadras, con 11′ de ventaja sobre Bahrain-Merida, el conjunto de Eusebio Unzué afrontará mañana el desenlace contrarreloj de la carrera, con 31 km CRI en el País Vasco francés, entre Senpere y Ezpeleta.

— Horarios salida contrarreloj (sábado 28, hora local, CEST): 13.05 Bennati, 13.57 Erviti, 14.23 Soler, 14.53 Amador, 16.03 Valverde, 16.13 Quintana, 16.19 Landa.

DECLARACIONES:

Mikel Landa: «Había que probarlo de lejos y me voy tranquilo por haberlo intentado. Cuando he arrancado en el Tourmalet sabía que sería muy difícil, pero en algunos momentos he llegado a soñar con la etapa e incluso con el podio en la general. El trabajo del equipo ha sido enorme, especialmente de Andrey, que ha demostrado ser un corredor impresionante y un tío increíble. Por desgracia, ha sido un día muy complicado, con bajadas en las que dar muchos pedales, compañeros de viaje que a veces no entregaban todo lo que tenían… y que atrás también se han obcecado mucho, hasta cazarnos en el Aubisque. En esa bajada Roglic nos ha tomado unos metros y me he quedado fuera de la disputa de la etapa.

Ha sido una lástima no poder corresponder al trabajo de Amador, pero siempre hay equipos con intereses por ahí: el trabajo de Katusha para defender un 10º puesto; Lotto poniendo ritmo y haciéndole también el trabajo a Sky… Siempre aparece uno que nos amarga la ‘fiesta’. Nairo y yo habíamos hablado antes de la etapa y él estaba con ganas, aunque quizás no haya podido estar tan fresco como antes de la caída; supongo que al final le ha pasado factura.

Ha sido un Tour en el que he tenido de todo, momentos buenos y malos. Mañana me gustaría hacer una buena contrarreloj y terminar de asentar la línea de resultados tan regular que he tenido este año. Es la primera que vengo al Tour con verdaderas aspiraciones -el año pasado hice 4º no sé si de rebote, pero sin venir a pelearlo- y por ello, me iré satisfecho independientemente de cómo acabe tras la CRI».

Nairo Quintana: «La caída me ha hecho mucho daño. Me dolía todo; sobre todo, la cadera. No podía ni levantarme de la bici. Hemos seguido ahí luchando, intentando perder el mínimo tiempo, y por fortuna teníamos a Landa delante, respondiendo a la estrategia de carrera que habíamos planteado, que era saltar él o yo en el Tourmalet y marchar hacia adelante a ver qué pasaba. Ha sido un día muy, muy duro, en el que la inflamación tras la caída le ha afectado mucho a mí cuerpo. Veremos cómo amanecemos mañana; quiero hacer una buena CRI, seguir probándome en esa disciplina, y sin duda iremos a tope».

Imágenes (c): BettiniPhoto.net