Giro de Italia (et. 19)
El ecuatoriano, respaldado una vez más sin percances por sus compañeros y especialmente un gran Mikel Landa -4º en la general- en la subida a San Martino di Castrozza, mantiene sus 1'54" de ventaja antes del 'tappone' dolomítico del sábado hacia Monte Avena.
Un puerto de plato, como se nombra en la jerga ciclista a aquellos de velocidades cercanas a los 30 km/h y que aún se pueden recorrer con el plato grande de la bici, encumbró a Esteban Chaves (MTS) este viernes en San Martino di Castrozza y mantuvo a Richard Carapaz y Movistar Team sin apuros al frente de un Giro de Italia 2019 que concluirá en apenas 48 horas en Verona.
Lluís Mas y Jasha Sütterlin firmaron dos de las actuaciones más destacadas de los telefónicos en esta 19ª etapa, tirando desde la conformación de la fuga -casi de salida- y hasta la base de los 13 km del último ascenso. Rojas, Amador, Pedrero y Carretero llevaron a partir de entonces la manija, hasta que una aceleración de Astana y un ataque de Miguel Ángel López obligaron a llevar el peso a Mikel Landa. Muy sólido en favor de Carapaz, el alavés sostuvo el ritmo y mantuvo también la marcha ante las aceleraciones finales de Roglic (TJV), a las que Richard respondió también sin problemas. No se movió -salvo por los 44″ obtenidos por López- la general, que mantiene a Carapaz con 1’54» de ventaja y a Landa, a 47″ del tercer cajón.
La alta montaña de este Giro 2019 concluirá mañana sábado con un tappone dolomítico: 194 km con salida en Feltre y los ascensos a Cima Campo (2ª), Passo Manghen (Cima Coppi), Rolle (2ª) y final con Croce d’Aune (2ª) y el Monte Avena (1ª). La penúltima gran batalla, y una de las más peligrosas, antes de la CRI decisiva del domingo.
DECLARACIONES / Richard Carapaz:
«Contábamos con que gente como López y Astana se podían mover hoy; hay corredores que buscan estar en el podio o remontar lo máximo posible en la general. Nosotros hemos ido muy tranquilos todo el día: en el inicio, con Lluís, Jasha y Rojas llevando siempre el grupo, y en el final, con Mikel, que ha hecho un papel importantísimo para mí. Más que un coequipero, con él tengo un líder en quien fijarme y aprender mucho. Tiene mucha más experiencia que yo, dirige bien a todo el equipo y eso se nota en la carretera.
Mañana es un gran día, una etapa con muchísima montaña, muy dura. Confío en mi equipo y ellos también tienen mucha confianza en nuestras posibilidades. No podemos descartar a ninguno de los seis primeros para la lucha por el podio o incluso por la carrera. Nos esperamos de todo y estamos dispuestos a afrontarlo. Será un día que decidirá mucho en este Giro y seguro que habrá un bonito espectáculo para todos. Nosotros intentaremos hacerlo igual que todos estos días».
