La lucha de Landa (2º) en Monte Avena; la generosidad de Carapaz
01 Junio 2019

Giro de Italia (et. 20)

El ecuatoriano de Movistar Team -que llegará con 1'54" de margen a la CRI final de Verona- muestra su altura humana contribuyendo a las opciones de Mikel para acceder a un tercer cajón del podio que defenderá mañana con 23" sobre Roglic (TJV).

Tres lecciones: una de coraje, otra de generosidad y una más de esfuerzo en equipo. Mikel Landa, Richard Carapaz y Movistar Team demostraron hasta el último día de montaña del Giro de Italia 2019 su condición de patrones en la carrera y estuvieron a punto de llevarse el tappone dolomítico de Monte Avena con un Landa (2º) que entra de manera provisional en el podio de la carrera.

Amador y Pedrero, a toda marcha en la aproximación a Croce d’Aune. (c) Luca Bettini / BettiniPhoto

Las dos puntas de lanza de la escuadra telefónica sostuvieron bien su situación de carrera en el ascenso inicial a Cima Campo (2ª) y contaron después con un enorme respaldo hasta los últimos puertos. La labor de control de José Joaquín Rojas, Héctor Carretero y Lluís Mas; el fortísimo ritmo de Andrey Amador para dar opciones de triunfo parcial a sus compañeros; y el ritmo continuado en los puertos de Antonio Pedrero ayudaron, todos juntos, a dar una oportunidad a Carapaz y Landa en busca de sus objetivos.

El propio Richard se puso al servicio de Mikel en la última subida, cuando Roglic (TJV) quedó descolgado, para abrir diferencias -casi 1′ en meta entre el vasco y el esloveno; 23″ ahora en la general a favor del de Murgia– e incluso perseguir un éxito parcial que acabó siendo para Pello Bilbao (AST), por delante de Landa. 1’54» será la ventaja con la que Carapaz defienda ante Nibali (TBM) ante los 17 km CRI que pueden coronarle como vencedor de su primera gran ronda por etapas.

Landa, al ataque en Croce d’Aune, luego neutralizado. (c) Luca Bettini / BettiniPhoto

DECLARACIONES / Richard Carapaz:

«A última hora en la subida a Croce d’Aune se ha seleccionado mucho la subida, nos hemos quedado Mikel y yo y hemos intentado buscar que se pudiese quedar con la etapa y, por qué no, también pelear el podio. Todos en el equipo hemos dado todo de nosotros mismos; ha sido un Giro de Italia espectacular por parte del equipo, duro como siempre, pero con un trabajo estupendo.

Ahora mismo no puedo explicar cómo me siento. Es una sensación y una situación únicas las que estoy viviendo estos días. Mi familia -mi mujer y mis hijos- han venido de Ecuador para vivir juntos este sentimiento, y ahora solo nos queda una fracción por delante. Emocionado y contento por todo lo que los chicos han hecho por mí. Ya pensando en mañana y en ese 1’54» que tenemos, no creo que debamos perder tanto tiempo mañana, creo que nos puede servir, pero cuando es competición siempre puede pasar de todo. Lo único que espero del día de mañana: disfrutarlo al máximo».

Imagen portada (c): BettiniPhoto

Equipo masculino 11 may - 02 jun

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(ª Etapa) ( km)