Tour de Francia (et. 20)
Los ataques de Soler y el arreón final de Alejandro y Mikel estuvieron cerca de dar a Movistar Team su segundo triunfo parcial en el Tour 2019, que concluirá mañana en París con Landa en 6ª plaza de la general.
Movistar Team se quedó este sábado a las puertas de añadir una segunda etapa a su éxito del pasado jueves en el Tour de Francia 2019 durante la explosiva y agotadora penúltima jornada de la carrera, sobre 59,5 kilómetros con salida en Albertville y final en el larguísimo Val Thorens -33 kilómetros y casi dos mil metros de desnivel-.
La escuadra telefónica llegó a contar con hasta siete de sus unidades, a mitad de subida, en un pelotón de favoritos de treinta corredores en persecución de una fuga inicial en la que figuró Nelson Oliveira. Los repetidos ataques de Marc Soler en la segunda parte de la ascensión contribuyeron a reducir la diferencia y dar incluso opciones al catalán. Sin embargo, el joven azul fue reintegrado a un grupo -tirado a ritmo exigente por Jumbo-Visma y Bora-Hansgrohe- que llegó a las últimas rampas a más de medio minuto de Vincenzo Nibali (TBM). Los arreones finales de Alejandro Valverde (2º en la etapa) y Mikel Landa (3º) no fueron suficientes para enjugar dicha distancia.
Landa concluirá, salvo imponderable, en 6ª plaza de una general que verá a Egan Bernal (INS) coronarse mañana como el primer colombiano en ganar la ‘Grande Boucle’, por delante de su compañero Thomas (INS) y el neerlandés Kruijswijk (TJV). París volverá a recibir, con sus ocho vueltas en los Campos Elíseos, a los supervivientes en la 106ª edición del Tour.
DECLARACIONES / Mikel Landa:
«Una pena. Todos ya sabemos lo bueno que es Nibali, y cuando va en una fuga siempre es difícil pillarle. Alejandro y yo hemos llegado bien a ese último repecho y ha sido una pena no conseguir la victoria, pero es que toda la subida ha sido muy asfixiante y difícil. Ninguno encontrábamos las sensaciones que queríamos, nadie se encontraba bien, era muy difícil salir de la fila cuando íbamos casi a 30 por hora en muchos tramos, y hasta el final era muy dificil moverse. Un puerto muy, muy rápido. Según he visto que empezaban fuerte esa última rampa y se sentaban tras la curva he arrancado, porque por un momento he visto a Nibali, pero en cuanto he visto el cartel de últimos 400 metros sabía que iba a ser difícil mantener ese ritmo de ataque.
Este Tour me ha servido para mucho. Vine con el objetivo del podio, la caida me apartó del mismo y fue difícil seguir adelante, pero por suerte volví a disfrutar en Pirineos, arrancando, haciendo lo que quería. He sufrido mucho y he aprendido lecciones que, de cara al año que viene, seguro me servirán».
Imagen portada (c): BettiniPhoto
