100 km de fuga del excampeón mundial, junto a unos excelentes Rojas y Verona, le llevan a las puertas del éxito y hacen sufrir a los favoritos en otra lección de entrega de Movistar Team
La Vuelta se reanudaba este martes con una etapa breve y nerviosa en tierras alavesas: 160 km con salida en Vitoria-Gasteiz y final en Villanueva de Valdegovía -ligeralmente ascendente- tras un doble bucle con ascensión incluida a Orduña (1ª; 7,8 km al 7,7%), con el último paso a veinte kilómetros de la llegada.
Fuerte viento (casi 30 km/h constantes; rachas de hasta 60 km/h) de componente suroeste -de cara en las subidas a Orduña- y una meteorología bastante revuelta, alternando tramos de claros con zonas de lluvia en el circuito final. Entre 10ºC y 14ºC durante toda la etapa.
Alejandro Valverde: «Al final hay que estar contentos. Hemos intentado ganar, en una etapa en la que el objetivo principal no era tampoco ese, y al final no ha podido ser. Cuando eres el más vigilado resulta muchísimo mas dificil. Me he movido en la primera subida a Orduña también por la general, pensando en que en la parte final pudiese haber algún ataque y Enric o Marc pudiesen contar con algo de ayuda. Me ha dado rabia al llegar a meta, porque ese ataque de Woods no he salido a por él y al final te arrepientes porque era el bueno y no le tenía que haber dejado marchar, pero… Por lo demás hemos hecho trabajar a los rivales y creo que hemos dejado buen espectáculo. Quiero dar las gracias al equipo, porque han hecho todos un trabajo fenomenal, pero Rojas y Verona, en especial, ha sido increíble ahí delante. Esta Vuelta no te da ningún descanso y sí nos ofrece muchísimas oportunidades; intentaremos aprovecharlas».
Enric Mas: «Una jornada muy dura, tanto en la fuga como atrás, donde a pesar de ir juntos se ha gastado muchísimo. Hay que dar la enhorabuena a Alejandro porque ha hecho una etapa de 10. Sabíamos que con su fuga se podía hacer trabajar a otros equipos y ganar otra baza más de cara a jugar nuestras opciones en la carrera y, además de ello, ha peleado la etapa como el corredorazo que es y ha terminado 3º; solo se ha escapado la victoria por situaciones de la carrera. Tengo que dar también las gracias al equipo, porque cada día están haciendo un trabajo estupendo y siempre estamos en la pomada.
Mañana será otro día clave en Moncalvillo, veremos qué pasa. Será una de las etapas cruciales, donde se va a jugar la carrera, y es un puerto que me va mejor que Formigal. Es más duro, lo hemos visto, lo conocemos y entrenando allí me sentí muy bien, así que me tiene que ir mejor. Tenernos ahí a los tres en un rango de dos minutos sobre el líder nos viene bien de cara a aspirar a la general. Es cierto que Alejandro habrá gastado un poco más en fuga tras ganar ese tiempo, pero como digo, atrás también ha sido día difícil. INEOS ha tenido mucho desgaste, tirando a tope desde la primera pasada por Orduña por la fuga, pero han trabajado bien».
La carrera se dirige mañana miércoles a tierras riojanas para cubrir la octava etapa, un recorrido de 164 km entre Logroño y la cima de Moncalvillo (1ª), novedad en La Vuelta con sus duros 8,3 km al 9,2%. Como paso previo, los corredores deberán afrontar el Puerto de La Rasa (2ª, 41 km al final).
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